jueves, 15 de septiembre de 2005

Los disparates de La Fortaleza Digital

La Fortaleza Digital.

Hace unos días terminé de leer este libro de Dan Brown y a pesar de que escribir sobre él aquí es casi como hacerle propaganda, no puedo quedarme callada y dejarlo pasar.
He llegado hasta el final, porque, eso sí debo reconocer que sabe hacerlo, el autor atrapa la atención del lector para que éste no pueda abandonarlo sin saber qué pasa; pero he ido de cabreo en cabreo.
Ya lo había leído en la prensa, que había quejas por la visión que se daba de España y de Sevilla en particular y pensaba que serían chauvinismos; pero me temo que no, que es aún peor de lo que las reseñas de prensa comentaban.
Este hombre, Dan Brown, debió de venir una vez a Sevilla hace cien años, o doscientos, y conoció una calle junto al barrio de Santa Cruz, y vio de lejos, muy de lejos, el Hotel Alfonso XIII, y en el aeropuerto ni entró. Bien, ni él, que no tiene por qué hacerlo, ni sus documentalistas, que tampoco se molestaron en mirar un callejero, para, por lo menos, mencionar más calles.
¿Como es posible decir tantas barbaridades, mejor dicho publicarlas en un libro que se va a vender y leer en todo el mundo, y quedarse tan tranquilo? 
Aquí tenéis unos ejemplos que aparecen en el libro:
- La clínica es una escuela primaria reconvertida, las camas de los pacientes están en el antiguo gimnasio, en donde aun se pueden ver los postes de las canastas de baloncesto, el policía lleva al canadiense ¡en una moto!, en los servicios de señoras del aeropuerto hay urinarios, si te hieren en un pulmón en España estas muerto, una bebida popular en España es el 'zumo de arándanos' (¿?) con vodka, las familias sevillanas acuden en masa a la catedral a una misa temprana todos vestidos de negro, los hombres de traje y corbata, las mujeres con velos, ... y otras cosas por el estilo ya recogidas en el articulo de El Mundo:  ¿Qué le hemos hecho a Dan Brown?
I stayed too long at the Airport
El modernísimo aeropuerto de Sevilla - Rafael Moneo

El Ayuntamiento de Sevilla ha invitado al autor a visitar la ciudad. Me parece un idea elegante.

2 comentarios:

  1. Pues que no la visite en Semana Santa, que si no en su próximo libro hablará de que en España todavía se pasea el KKK

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  2. Ja,ja,ja... eso ya lo decían los alumnos ingleses cuando los llevabamos a ver las procesiones en Granada. Todo el mundo parecía tan emocionado y ellos se partían de risa.

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