domingo, 14 de septiembre de 2025

Perdida

                              
      Caminaba por un pasillo con puertas a ambos lados. Yo me dirigía a la del fondo porque sabía que tras la última puerta estaba mi solución, la clave que me explicaría por qué yo era como era, pero aquellas puertas entreabiertas me atraían tanto que me hacían demorarme en mi misión.


La primera puerta me llevó al primer verano fuera de casa.

        En la segunda me perdí en un laberinto de papeles y burocracia. 

    Más adelante caí en el encofrado del aparcamiento de un edificio en construcción y caminé entre columnas de placas metálicas rellenas de cemento.

    No sé por qué elegí la siguiente puerta, allí todo estaba oscuro y se oían susurros misteriosos. Un hombre con barba muy recortada de color castaño oscuro y ojos marrones claros me dijo que entrara y él me llevaría al éxito. ¿Qué es el éxito? --pregunté. El solo sonrió y yo volví al pasillo.

       
Pasé por un parque infantil. Los niños no me miraron.


Llegué a las estrellas y allí me perdí durante mucho tiempo.